Mario
Fortino Alfonso Moreno
Reyes, más conocido como Cantinflas nació en Santa María de la Redonda, México
D.F. el 12 de agosto de 1911. Fue conocido a lo largo de su vida como “El Mimo”
o “El Cómico de la Gabardina”.
Su salto a la fama
en un primer momento fue fruto de la casualidad, ya que al ir a realizar una de
sus actuaciones se produjo un incidente, por lo que Cantinflas tuvo que salir a
calmar al público; los nervios no le permitían hablar con fluidez y su tartamudeo
hacia reír de forma incontenible a la audiencia. Así, se inicio su carrera de
cómico.
Una característica fundamental de Cantinflas es su extraordinaria capacidad de
improvisación oral, basada en un estilo de lenguaje realmente único y
paradójico, pero conducido a explicar hechos y sucesos bajo una lógica muy personal, puramente
"Cantinflesca". Solo se le quebraba la voz cuando hacia una
declaración de amor o le sugería un
“encuentro picaresco” a su coprotagonista femenina.
El 27 de octubre de
1936 se casó con Valentina Ivanova Zubareff, de origen ruso. Su matrimonio duraría hasta su
muerte en 1966, víctima del cáncer. Aunque con Valentina no tuvo hijos, ella
adoptó un hijo que había tenido Mario en 1961, al cual llamaron Mario Arturo
Moreno Ivanova.
Él era un actor perfeccionista que siempre intentaba superarse así mismo.
"He filmado mucho", dijo en una ocasión, "y no obstante no he
quedado conforme con lo que he hecho hasta el momento. Tampoco creo que quedaré
satisfecho con lo que haré en el futuro". Cuando alguien le preguntaba
cuál era su mejor film, él respondía con firmeza: "El que voy a
hacer". El
mismísimo Charles Chaplin le admiraba, incluso le llegó a catalogar como “el
mejor comediante del mundo”. Intentó hacer una película con él, pero nunca fue
posible.
Mario Moreno, no
solo era un gran actor, sino que se vio siempre atraído por la literatura,
llegando a publicar una novela denominada “Su Excelencia”, preocupándose por
los problemas políticos y sociales del mundo, y concretamente de su país.
Estuvo involucrado también en asuntos de política, llegando a recibir
peticiones populares de candidatura a la Presidencia de la República.
El estilo inconfundible de Cantinflas, basado
principalmente en su jerga cómica improvisada, ha sido imitado por otros
cómicos, no solo en México sino a lo largo y ancho de Latinoamérica
consiguiendo pasar al cuadro de honor del cine.
Lo más distinguible en Mario Moreno era que no promovía el conflicto de las clases,
sino por el contrario, era un perfecto reconciliador mediante las posibilidades
que le brindaba la comedia. De ahí que todos los sectores sociales se riesen
con él y lo respetasen por igual. Por esto, en Guatemala lo nombraron
miembro honorario de la policía; en Colombia, jefe honorario de la
policía y maestro rural y en los Estados unidos, en la Universidad de Michigan,
doctor Honoris Causa.
Tras retirarse del
mundo artístico comenzó a contribuir en organizaciones de caridad,
especialmente en aquellas destinadas a ayudar a los niños.
Falleció de cáncer
de pulmón el 20 de abril de 1993 a los 81 años. Sus cenizas yacen en el Panteón
Español de la Ciudad de México. Entre los reconocimientos que recibió se
encuentra una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, el Globo de Oro en
la categoría de “Mejor Actor” por su participación en la película “La vuelta al
mundo en ochenta días”. Como curiosidad incluso destacar que incluso motivó la
aceptación en la RAE del término “cantinflear”.
